Cómo limpiar el pipí de un colchón

Actuar con rapidez permite limitar los daños en el colchón

Una de las claves en la limpieza de un colchón es actuar de inmediato. Es importante no dejar nunca que las manchas se sequen o que los olores se incrusten. Lo ideal es ocuparte de ello en mitad de la noche, a cambio tendrás que invertir menos tiempo en la limpieza del colchón. No es necesario limpiarlo en profundidad de inmediato; puedes simplemente aclarar la mancha con agua tibia. Después recoge el agua empapando un papel absorbente, hasta que retires toda la humedad posible. A la mañana siguiente puedes terminar de limpiar el colchón.

Usa solo limpiadores naturales

Si lavar la ropa y las sábanas es relativamente fácil, no tiene que ser muy diferente en el caso de los colchones. Hay muchas formas de lavar un colchón, y muchos de los llamados remedios de la abuela son en realidad muy eficaces. Lo primero que debe hacerse para limpiar un colchón infantil es evitar los productos químicos, que además pueden ser tóxicos en caso de no usarse correctamente. Una técnica sencilla consiste en mezclar un vaso de vinagre blanco con tres vasos de agua caliente, y frotar el colchón con el líquido mezclado. Otro elemento que da buen resultado es el bicarbonato sódico. Este polvo mágico se deja durante 5 horas o más en el colchón y eso permite deshacerse de los malos olores. Luego se pasa una aspiradora limpia sobre la superficie tratada y el colchón quedará limpio.

Limpiadoras de vapor

Si tienes una máquina de limpieza por vapor puedes probarla, porque suele ser una solución eficaz para ropa de cama y tapicerías. Sin embargo, este tipo de limpieza con vapor no es tan eficaz como lavar y mantener limpio el colchón de forma habitual. Hay que empezar por limpiar las manchas: con cristales de sodio, con agua oxigenada... Las técnicas son numerosas. Después hay que quitar el polvo sucio que queda sobre el colchón. Puedes ayudarte de una limpiadora de vapor para un acabado perfecto. Ten en cuenta que no es necesario usar la limpieza de vapor demasiado a menudo: con una vez al año bastará.

Ocuparse de las aureolas o cercos

¿Cómo podemos limpiar esos cercos resistentes (a menudo parecen aureolas amarillentas) que quedan sobre el colchón? El amoniaco es uno de los mejores desincrustantes de manchas, pero es un producto que se debe manipular con mucha precaución. No olvides protegerte bien las manos y la cara, y ventilar la habitación de forma correcta. El producto debe aplicarse con un trapo humedecido. En un barreño con agua tibia, añadir un poco de lavavajillas y una taza de amoniaco. Moja una bayeta o un estropajo con esta mezcla y procede a limpiar con cuidado el colchón manchado. Puedes dejar actuar el producto durante 10 minutos. Con un estropajo húmedo, aclara la zona que acabas de limpiar. Otra solución para limpiar un colchón y que necesita menos vigilancia del producto empleado, es someter la mancha a la acción combinada del vinagre blanco y el bicarbonato sódico.

Más vale prevenir que lamentar

De todas formas, ningún colchón dura eternamente, por lo que esos métodos de limpieza solo son eficaces durante un tiempo. Si tu hijo sufre enuresis, la mejor solución es proteger cuanto antes su colchón. Para eso, puedes poner bajo las sábanas un protector de cama absorbente desechable DryNites® que proteja el colchón de futuros accidentes. El protector es muy fácil de utilizar: superabsorbente, se desliza debajo o sobre la sábana bajera y no se mueve de su sitio gracias a sus bandas adhesivas. Desechable, es muy simple de cambiar. Su formato de 88x78cm permite proteger toda la superficie del colchón de tu hijo, y así evitarás tener que limpiar el colchón cada vez que se produzca un accidente de enuresis.