Psicología y enuresis: ¿cómo ayudar a su hijo?

Enuresis: ¿cuáles son las causas psicológicas?

Una vez que el médico ha descartado una causa orgánica de la enuresis que sufre el niño o adolescente, muchas veces sólo queda una explicación psicológica, tal y como recoge el documento “La psicología puede ayudarte: enuresis nocturna y encopresis en niños” de la Asociación Canadiense de Psicología (1).

Niño enurético – estrés y ansiedad

En los niños pequeños, existen dos tipos de enuresis, tal y como recuerda el Johns Hopkins Hospital (2):

• Por un lado, la enuresis primaria, que caracteriza a los niños que nunca han dejado de mojar la cama.
• Por otro lado, la enuresis secundaria, que se presenta en niños que han dejado de mojar la cama ya, pero que retroceden al volver a tener “accidentes” constantes.

En el caso de enuresis asociada a trastornos de la micción, primero es necesario consultar con un cirujano urólogo infantil o un pediatra especializado para descartar cualquier origen orgánico de la enuresis. Si la causa no es orgánica, la enuresis nocturna puede estar relacionada con factores psicológicos, principalmente debido al estrés o la ansiedad. Las razones por las que un niño puede empezar a mojar la cama de forma repentina suelen ser las siguientes:

• Cambio significativo en la rutina del niño: vuelta al cole, nueva niñera, mudanza.
• Problemas en la familia del niño: conflictos entre los padres, separación de los padres, enfermedad grave o muerte de un familiar, nacimiento de un hermano o hermana, anuncio del embarazo de la madre.
• Ansiedad relacionada con el uso del baño: miedo a los gérmenes, a la habitación en la que se encuentra el orinal o el inodoro, miedo a usar los baños comunes del colegio o guardería, etc.
• Estrés postraumático, maltrato familiar o institucional…

No descuide la enuresis en el niño: mojar la cama tiene un significado, y puede tener importantes repercusiones psicológicas y sociofamiliares.

Enuresis adolescente

Las causas de los trastornos de la micción pueden estar asociadas a:

• Estreñimiento, debido a una mala alimentación, demasiado rica en grasas y azúcares, y carente de fibra, que contribuye al buen funcionamiento del tránsito intestinal.
• Aguantarse demasiado tiempo, evitar ir al baño durante el día en la escuela o la universidad, o no vaciar completamente la vejiga cuando va al baño. Una enfermedad infecciosa que afecta el tracto urinario.

Por otro lado, es importante comprender que la enuresis nocturna persistente en los adolescentes a menudo está relacionada con causas psicológicas. De hecho, a esta edad, los factores emocionales pueden jugar un papel importante en el mantenimiento del trastorno. Los padres y los profesionales de la salud deben tener en cuenta estos factores psicológicos y abordarlos al tratar la enuresis nocturna de los adolescentes.

Psicología y enuresis – el tratamiento

La enuresis con causas psicológicas puede ser tratada por un psicólogo infantil, que sabrá cuidar al joven paciente para ayudarle a superar esta fase.

Mojar la cama: ¿cuándo consultar a un psicólogo?

Una vez que el pediatra o cirujano urólogo infantil haya descartado las causas orgánicas que puedan explicar la enuresis, derivará al niño y a sus padres a un psicólogo. Aunque la enuresis nocturna relacionada con la psicología a menudo se resuelve sola sin tratamiento, consulte a un psicólogo para beneficiarse del apoyo de un especialista.

El papel del psicólogo en la enuresis

La opinión de un psiquiatra o psicólogo infantil es valiosa para el tratamiento de la enuresis en niños, no sólo en caso de fracaso del tratamiento sintomático, sino también cuando la enuresis está ligada al sufrimiento psíquico. Este último puede tener diversas causas, como carencias emocionales, un clima familiar conflictivo, estrés postraumático, un contexto neurótico o incluso depresión.

Es importante destacar que algunas enuresis persistentes pueden terminar desapareciendo espontáneamente durante la adolescencia. Sin embargo, se deben hacer preguntas acerca de la importancia de esta enuresis nocturna tardía y determinar las respuestas apropiadas. En algunos casos, la atención a largo plazo puede estar justificada para garantizar un seguimiento regular y trabajar sobre los factores psicológicos subyacentes. (4)

En resumen, es importante abordar los aspectos psicológicos de la enuresis en los niños, buscando el consejo de un psiquiatra o psicólogo infantil si es necesario. El tratamiento debe individualizarse en función de las causas subyacentes de la enuresis nocturna y adaptarse a cada niño. En algunos casos, el tratamiento a largo plazo puede estar justificado para garantizar un control regular y ayudar al niño a superar sus dificultades.

Fuentes:

(1)https://cpa.ca
(2)https://www.hopkinsmedicine.org
(3)https://www.cincinnatichildrens.org
(4) Philippe C Tratar a los niños enuréticos sin enfermarlos. Medicina e Infancia, 2008; 28 (Suplemento): 1-7